miércoles, 20 de agosto de 2008

¿SUBIRÁ?

Érase un cohete que no quería subir, por mucho que le encendieran la mecha seguía sin decidirse, echaba humo, pero seguía quieto, las gentes se quedaron sin color esperando la explosión que podía ocasionar si no subía y hacía su papel, anunciar la fiesta, pero él seguía empeñado en quedarse para ser también partícipe de la fiesta. En esto, que sumido en sus pensamientos notó como la mecha encendía la pólvora que debía llevarlo hasta el cielo y allí anunciar el inicio de los festejos, nada pudo hacer y con la explosión el júbilo de los de abajo se desbordó, pero él ya no era nada, humo en el aire y una estela de olor a pólvora, la explosión ni siquiera tuvo eco, pero abajo el bullicio y la alegría se desbordaban por momentos, él nunca participaría de esa alegría colectiva, y ya nadie se acordaría que fue él y nadie más quien dio la señal de inicio de fiestas. Triste final el de un cohete que asusta a los pequeños, hace temer a los mayores por si le da por no subir, acaba en una efímera llamarada y humo que se disipa en el aire, sin embargo siempre anuncia fiestas y nunca puede participar. ¡Triste eso de ser cohete!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Exactamente, ¿a que fiestas nos anunciaba dicho cohete? ,porque haciendo referencia a la tristeza de ser cohete depende desde donde tenga que partir todavia es mucho más grande su tristeza, a veces es también el "reflejo" del final con el que se nos avecina la traca final.

Anónimo dijo...

Anönimo Veneciano , tienes un E:Mail en tu Buzón.

Fe : Es Creer sin Ver