PARDILLOS QUE SOMOS UNOS PARDILLOS

Andaba pensando en esta climatología “tan rara” que tenemos este año, otoño que se resiste en llegar, lo mismo que las lluvias, ya ni nos acordamos que es eso de la lluvia, paisajes resecos hasta la saciedad, siembras en seco, esperando el milagro de la lluvia, sino, a esperar otro año, vamos una delicia esto de la climatología.

Con todo ello hay quien está contento, hace buen tiempo, no hace frío, ¡qué bien se está!, si que es verdad que les puedes fastidiar un poco esa sensación advirtiéndoles de los peligros de un tiempo poco adecuado, es una forma como otra cualquiera de amargarles el paseo o la sentada en un banco en calle o plaza.

Y a todo eso se me ocurre hojear uno o varios periódicos.

Pobrecillos los Becerril, ó Bárcenas, o Fabra, y otros tantos más, con lo bien que vivían, con sus cuentas repletas, sus reformas de casas costeándo entre todos, sus viajes a playas idílicas, masters para los niñas y niños, familiares que sacaban su tajada, llega, un o una contable cabreada o cabreado y lo cuenta todo.

Han tenido que ser los subalternos, los que han descubierto el pastel, también alguna novia despechada, como en el caso de Puyyol y las ITV,s, vamos que todos viviendo en el país de nunca jamás sin enterarnos y llegan esos vengadores y nos joden el día, o los días, uno si otro también, ¡con lo a gusto que estábamos paseando a temperatura primaveral!.

Es de suponer que los que quedan a partir de la fecha harán partícipes a esos oscuros empleados que parece que no están pero que en cualquier momento pueden hacer un roto, vamos que untando la rebanada con abundante mantequilla se traga mejor.

Con la cantidad de empresas, Plaza,s, ERES, sociedades mixtas, y otros especímenes que deben quedar todavía por la geografía patria, si hasta los de la familia real están pringaos, ¡pena me da la pobre Infanta, nadie le advirtió, ¡si es que el amor es ciego!, el Duque le decía y ella hacía, vamos que como eres infanta y tu papá rey no creo que nadie se atreva, y oye, que va y se atreven, y sacan trapos a medio lavar, remendados y llenos de polillas, vamos que ¡pobrecillos!, con lo bien que vivían en su palacete.

No tenemos remedio en este país, el que no trinca es porque no puede, o no sabe, porque miedo, lo que se dice miedo, no es.

Otros sin embargo van de cara, léase el sr Biel, que si el Becerril se ha llevado 50 kilos, porqué no me voy a embolsar yo 46, y nos hace un barato a los aragoneses, además va a repartir entre los suyos, para comprar voluntades y votos de cara al 2015, que ya está cerca, pero no, vamos que si te los doy a ti que me queda a mi, le dicen los socios.

Y así discurre la vida, placentera de los ciudadanos de este país, entre cabreados y benévolos, porque, jodeeer y yo con mil euros, piensan, a la vez que lamentan no haber conocido en su momento a los que repartían a manos llenas, y Becerril que hace unos años, pocos fue distinguido como Gran Aragonés, con ,medalla y todo, por su excelente gestión, ¡ya nos vale!, pardillos, que somos unos pardillos.