¡QUÉ NERVIOSSSSS!

De la misma forma que la naturaleza ofrece, aún en invierno, las primeras pinceladas de color, en este mes de febrero, a mitad del invierno, la vida política y social puede seguir sus pasos.

Este mes, el sábado 15, se abrirán las puertas del Ayuntamiento para ver, que es lo que se ha venido haciendo en los últimos nueve años, en julio de 2004, se cerraron sus puertas para realizar obras de ampliación y mejora.

El plazo, era de unos tres años, cuatro a lo sumo, esos plazos se han ido dilatando, y, finalmente es una realidad, oculta de momento, hasta el próximo sábado en el que aquél que lo desee podrá ver el fruto de estos años de obras.

Lucirá en todo, bueno casi todo, esplendor, faltan los últimos detalles del Salón de Plenos, especialmente dar mayor realce a la puerta del Castillo.

A partir de ese momento solo quedará el traslado de material administrativo e informático, se espera que para Semana Santa ya esté totalmente operativo.

Queda una sombra, una pequeña duda, ¿perderá el Ayuntamiento la proximidad actual?, las oficinas actuales en los Arcos del Toril, han sido estos años un lugar cálido, apretado pero cálido, ha sido la casa del pueblo, es posible que debido a la falta de espacio, pero entrar en el Ayuntamiento era como entrar en casa, te puedes mover con cierta facilidad y familiaridad.

Pronto nos encontraremos, con un lugar grande, frío, ¿será también distante?, ¿se podrá mover el ciudadano con la libertad actual?.

Por una parte apetece tener de nuevo un Ayuntamiento grande y cómodo, por otra es posible que añoremos ese pequeño espacio que durante nueve años ha sido la Casa Consistorial.

La Residencia, pinta mal, hay una noticia en prensa decía que las residencias aún teniendo plazas conveniadas, no cobran, y en la mayoría de los casos no están ocupadas, así que no teniendo convenio, mal pinta la cosa.

Tras muchos meses de retraso la ordenanza cívica ha visto la luz, y el día 14 de febrero, se ha convocado una reunión para darle forma y contenido, en este tema es necesaria la participación ciudadana, sin ella, la ordenanza será poco más que papel sin contenido.

El carnaval se ha contagiado de los edificios en obras, y se retrasa dos semanas, no una, dos, es posible que así la orquesta y charangas sean mucho más baratas, Maella también ha pensado lo mismo.

Y llegamos a la cuestión político administrativa, anda por ahí, todavía, el tema del Hotel Latorre, la comisión que debería haber emitido el informe en el pasado pleno no lo hizo, así que en el pleno de febrero, es de suponer, sabremos las conclusiones, y queda claro que las acciones, un tema peliagudo.

Qué decir del presupuesto municipal, nada se sabe, ¿ya está elaborado?, y si lo está ¿hay posibilidad de que se apruebe?, y si no se aprueba ¿qué pasará?, porque algo pasará, no hace mucho se podía dilatar, prorrogar, de un año para otro y no pasaba nada o casi nada, hoy las cosas han cambiado, se corre el riesgo de perder recursos económicos, y no pocos, se trabajará muy mal, nadie sabrá a que atenerse, puede haber una paralización total o casi total en inversiones, quedando solo ejecutable el gasto corriente, reparaciones y poco más, y todo ello se debe decidir antes de la primavera.

¿Habrá o no moción de censura?, nos tienen en vilo, en un sin vivir, el ciudadano está a la espera, se comenta en los mentideros habituales que ya está casi a punto, pero nadie suelta prenda, lo más, “estamos negociando”, ¡si, pero con quién!, y ¿quien negocia?, la oposición en bloque, en fragmentos, el gobierno con la oposición, con toda, con PARte, ¡qué nervios!.

Podemos imaginar por donde van los tiros, hasta podríamos aventurar las condiciones que ponen unos y otros, podríamos de la misma forma suponer las partes implicadas en cada negociación, las posibles y las imposibles, podemos incluso prever que no sucederá nada, que todo quedará igual, con los problemas que ello conlleva, no queda demasiado tiempo para maniobras ni aventuras, han pasado casi dos años y los últimos seis meses antes de las elecciones de 2015, es previsible, como ha sido siempre, no se tiene demasiado tiempo para gobernar, más bien se ocupa en conseguir gobernar.

Así las cosas, no hay demasiado tiempo de maniobra, de esta forma pueden surgir los “nervios” y no hay demasiada medicación, actualmente para tratarlos.

nota: si no se entiende bien este escrito se puede traducir, usando el traductor de la página, al latín, polaco, alemán o albanés, también al coreano chino y japonés